El Fallecimiento de Paco y Juan en la ultima edición del Maraton de Vias Verdes OJos Negros-Navajas, nos deja una huella muy profunda en el pueblo y los vecinos de Navajas, pueblo que ha sido cuna de muchos corredores de fondo, hemos entendido el mensaje que nos han querido transmitir y que queda reflejado en el escrito de Manolo Torres, gran fondista de la vida y que compartimos con todos.
La memoria
Solo unos pocos momentos son los que recordamos el resto de nuestra vida. En realidad eso es nuestra vida. Estaciones, estrellas a las que viajamos y entre las que vamos trazando líneas y dibujando la constelación de nuestro vivir.
Como seres inmateriales, suspendidos en su fidelidad y persistencia esos momentos son como gotas de esencia de la memoria y cuando volvemos a ellos florecen todos los detalles de los sentido y de los sentimientos y revivimos hasta el más mínimo sonido, olor , roce o caricia con más precisión que cuando fue.
Y tienen los recuerdos como satélites hermanados otros recuerdos. Los de la vida , otras vidas. Los de dolor , otros dolores. Y los de muertes , otras muertes.
Deberíamos atender a estos diminutos lugares que como agujeros negros guardan en su interior el tiempo pasado. Si pretendemos ser organizaciones inteligentes ( ayuntamiento, grupo político, clubs) tenemos la ocasión de embalsamar para el futuro unos instantes y poder contar a los que vengan lo que nos pasó , lo que sentimos y como lloramos y lo que aprendimos.
Guardemos de un modo concreto todo lo que pasó el 10 de abril. Escribamos la grandeza de los corredores de fondo.
Dejando que otros arreglen lo legal y lo científico , nosotros hablemos de lo noble que tiene la búsqueda del sentido de la vida a través del deporte. Recordemos a nuestros niños y jóvenes la importancia de tener expectativas y buscar una vida excelente . Salgamos juntos de la epidemia de vulgaridad que nos inunda y valoremos la calidad , la alegría , el esfuerzo , el trabajo diario , la generosidad y el sueño que guía a los deportistas populares.
Busquemos como ellos la dignidad que dan esos triunfos tan pequeños como acabar una carrera en la última hoja de las clasificaciones y el constante aprender para mejorar , frente al vulgar y extendido : “ no me arrepiento de nada”.
Hagamos aliados para siempre a nuestros amigos Francisco y Juan Antonio. Nos han dado y nos pueden seguir dando tanto que jamas podremos devolvérselo.
Dediquemos un espacio, un punto, una piedra, una estrella, a admirar la bondad y la grandeza que nos dejan.